jueves, 3 de febrero de 2011

Las vueltas de la vida

¡Hola!, ¿a ver esas manos?, me dice un chico hablando en un español muy raro. Lo miro sorprendida y alejándome un poco, al instante le veo los ojos, me derrito y no puedo evitar seguirle el juego.
Me prueba un producto para las uñas, me las pule, me da una crema. Me cuenta que es fotógrafo y de Francia. Me habla, me habla y me habla con su acento francés. Le compro el fucking kit de productos para las uñas que jamás voy a usar (25U$ pagué, por cierto, porque todo esto sucedió en un shopping en Orlando). Me dice que me vaya a Francia con él, me da su mail.
Paso de nuevo, me grita "Argentinaaaa!", me doy vuelta semi-desmayada, "mi amoor!", me dice para que me termine de desvanecer.
Cuando llego a Buenos Aire de nuevo, 15 días después, dudo, la dirección es rara, no lo puedo agregar al msn. No sé si mandarle un mail, me siento un poco pelotuda. Boludeando lo encuentro en facebook. Miro su book de fotos de homeless y me parece un bohemio hermoso, salido del Mayo Francés, me enamoro más, me siento más pelotuda.
A los pocos días le mando un mensaje privado para expresarle mi fascinación por sus fotos. Le explico quién soy aunque aclaro que seguro no se acuerda de mi. Me responde que no, que no se acuerda pero que me agradece. Ok, era obvio, igual, morite.
Después de un par de días encuentro un comentario en una foto mía disfrazada de cowgirl "Gracias a esta foto me acuerdo de tí.", ok, no entiendo por qué la foto en la que estoy semi en bolas vestida de vaquerita, pero bien!, se acuerda, sonrío.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

ajajajja hacete un boook especialmente, semi en pelotas y ya fueee jaja

SOL dijo...

juaaaaaaaaaaajajajajajajajajaja el frances no se entiende una mierda, pero taaaaaaaan lindo que enamora a cualquiera. El idioma del amor es universal! jajaja